Conciencia Espontaneidad Comunidad
Amaya es un movimiento de personas para alinearnos con nuestra propia esencia.
Comienza como un proyecto creativo y de etnografía colaborativa encarnada para aprender a guiar espacios inclusivos de práctica corporal, dónde la diversidad humana -personas con discapacidad, trans, queer, etc- podamos estar reunidas y superarnos juntas.
¿Cómo nace y para qué?
Hago este relato en primera persona.
Antes del nacimiento de Amaya trabajaba como antropóloga, guía de circo y de yoga desde la educación inclusiva y la diversidad sexual, lectora de registros akáshicos.
Quería unificar mi servicio y quien soy, salir de la fragmentación.
Cada vez que nos separamos de nuestra propia esencia, ya sea porque le damos valor a la voz de otra persona o a la voz de la cultura, nos posicionamos desde la falta de amor. Cada vez que vemos a otra persona y pensamos que es diferente de mí, cada vez que nos creemos que las categorías que usamos para comunicarnos son reales -hombre, mujer, persona con discapacidad, persona sin discapacidad, persona trans, persona cis- nos separamos. Todas estas categorías son ilusiones. Al soltar la ilusión lo único que permanece es la unión, el amor. Y eso es Amaya.
Amaya nace con una semilla de amor que sembré en la Luna Nueva de Abril de 2019.
Le pedí a la Luna que se llevara la duda de mí misma. Le canté a mi oscuridad, a mi vientre y al vientre de la Tierra. Lloré para despedir lo viejo, bailé abrazando la oscuridad del inicio, el vacío, el silencio. A la Luna Creciente le pedí el nombre de esta creación. Y escuché como un mantra de Luna llena su nombre: Amaya Como una invitación a amarnos ahora, sin esperar más, ahora mismo, amarnos.
Amaya nace junto a la Luna desde la conciencia plena, la humildad y el amor.
Para unificarnos en nuestra diversidad.
Para transformar una pedagogía desde y para las corporalidades que participamos, dónde seamos incluidas.
Para desaprender lo que nos dijeron sobre lo que deberíamos ser.
Para sentirnos y recordar quiénes somos en esencia.
Para encarnar el conocimiento que viene desde dentro nuestro, darle cuerpo a nuestra sabiduría interior, darle movimiento.
Ofrezco esta creación a la Tierra y a los seres que viven en ella como un regalo divino.
Jade Colibrí